sábado, 6 de diciembre de 2014

Tegucigalpa

Sábado, 06/12/2014

Los acontecimientos de los últimos días en Somoto fueron haciendo su efecto poco a poco. El cambio de frontera en un lado simples policías en el otro militares, aquel hombre de la gasolinera con la recortada, la cada vez menos disponibilidad de la gente por llevarnos 'A ride'. Quizás los 30 y la auto-preservación, o quizás sólo algo completamente inducido para así no proseguir las aventuras. Sea como fuere, el temor caló. No me atreví a aventurarme sola por los alrededores de Honduras, los autobuses salían demasiado pronto y llegaban demasiado tarde, siempre de noche. Fue la mejor decisión que pude tomar.


Tegucigalpa me brindaría con unos días de reposo, con algunos nuevos amigos bohemios, fiestas todas las noches y la calidez de sentirme como en casa. Fernando nuestro increíble host y persona, Rober tan inocente, Merl@ la artista fumona, Oto el vecino de arriba risueño, y por supuesto, Michaela el alterego que me llevaría a las calles a bailar.


Tegucigalpa era la cosa más temida en mi viaje, y sin embargo, enseguida estaba completamente integrada y sin estúpidos miedos. Quién sabe a veces lo que le impulsa a uno para ser tan descarada e ir a todas las tiendas de segunda mano a probarse vaqueros con esta cara. 


Los chicos también se ganaron su comida y vicios a base de pequeños billetes que conseguían en los semáforos. Cada uno a su manera, disfrutando de la capital más peligrosa del mundo -me hace reír, después de mi grata experiencia.


SUNKINDARKNESS