Lunes, 30/10/2017
El dilema de quedarnos, o en Santa Marta, o en Roadero, o en Taganga, se vio resuelto al cruzarnos con unos argentinos que nos recomendaron ir a este último.
El alojamiento en Taganga era muy barato y parecía un buen lugar para reunirnos con Arturo. Además Taganga resulta una buena base para poder ir a hacer submarinismo.
La visibildad no es genial, pero la verdad es que es un bonito acuario con muchas corales cerebro.
Además visitar Santa Marta resulta de lo más accesible.
Quizás lo más interesante de Santa Marta sea su mercado donde puedes encontrar amistades de lo más curiosas, indigenas Wayuu.
Como anécdota queda decir que Arturo se golpeo la cabeza con la litera a las 4h de aterrizar en Santa Marta y tuvimos que ir de urgencias al hospital por conmoción cerebral.
SUNKINDARKNESS