Jueves, 24/01/2013
El camino hasta Can Tho fue un
despliegue de arrozales con sus respectivas tumbas y de ríos y
canales pertenecientes al delta del Mekong. Al llegar sabía
perfectamente donde tenía que encontrar a Thao, así que el minibus
de la compañía me llevó hasta la estatua de Ho Chi Minh que hay al
lado del río Mekong, aquí llamado Can Tho River.
Tras esperar unos cuantos minutos, Thao
apareció y me dijo que hoy tenía previsto recibir una clase de
inglés y que si no me importaba acompañarla, por supuesto que no
contesté, y llegamos a un café donde un americano explicaría
cultura americana. Habló de los estados de EEUU, de sus sitios
más interesante y las diferencias entre la gente. Yo me pasé el
rato haciendo mis deberes con el ordenador.
Al terminar el curso, no me había
cundido para nada mi hora de internet. Huyen se me presentó como la
amiga de Thao que me acogería en su casa con su familia. Fuimos
cerca del mercado y allí pude cenar un delicioso y baratísimo sticky
rice con verduras y pollo. Tras terminarlo Huyen me llevó a su casa
y allí me enseñó mi hueco.
Trabajé hasta tarde con el ordenador,
trazando los planes para visitar filipinas, comprando vuelos y
mirando ferrys. Me dieron las 2h.
A las 6h con muy mal cuerpo estaba
lista para ir a visitar el delta del Mekong. A las 6h30 mi barquita
zarpaba conmigo y mi barquero que no hablaba ni una pizca de inglés.
Al notar las punzadas en el estómago empecé a lamentar haber
escogido la versión de 7h para visitar el delta, en vez de la de 3h. Penasba que estar 7h en la barca sola sería un puñetero
coñazo y la tripa cada vez me dolía más.
Paramos en algún lugar para que viene
como se hacen los nudels de arroz. Interesante, pero me faltó la
explicación de alguien que pudiese confirmar las ideas que se
formaban en mi mente.
Tras visitar el primer mercado
flotante, que era muy grande, llegué a un par de conclusiones. Donde
debería de estar la bandera pirata había la fruta o verdura que se
vendía principalmente en el barco, que era temporada de piñas y que
la gente era mucho más sonriente en el sur que en el resto de
Vietnam.
Empecé a quedarme adormilada, así que
a pesar de que a medida que nos alejábamos de Can Tho el paisaje era
mucho más interesante, sin tantos muelles de carga y descarga, sin
tantas gasolineras... no resistí el cierre de mis párpados, así que
a la primera cabezada, opté por tumbarme en la proa y quedarme
dormida tomando el sol. Abrí los ojos justo cuando nos acercábamos
al segundo mercado, quizás habría dormido 1h.
El segundo mercado en vez de estar
compuesto por barcos, lo estaba por barcas a remos. Mucho más cuco.
Dimos un paseo remando y me empecé a comer la piña que mi capitán
había pelado antes para mi y no había podido comer.
Dimos media vuelta, pero en vez de
hacer el mismo circuito fuimos por los canales viendo las casas y el
estilo de vida de sus gentes. Muy parecido a las backwaters de
Allappey (palmeras, árboles frutales, plantas de nenúfares...), pero
diferente. Las casas daban directamente al canal, donde la cocina y
puede que el baño tenían su correspondiente puerta al río. Paramos
en una guest house, suponían que comería allí... pero era muy
pronto y mi estómago aunque mejor después de la siesta no quería
verse comprometido con ninguna comida extraña, así que me fui a dar
un paseo por los alrededores,
Los perros ladraban a mi paso, las
gallinas y gallos huían. Unos chicos jugando a las cartas y
apostando, al lado gallos enjaulados para su correspondiente pelea de
la tarde.Un perro que me acompañó todo el paseo y un cachorrito
lindo que venía saludarme.
De vuelta a Can Tho, Thao me llevó a
tomarme un café pues me estaba volviendo a quedar dormida. Fuimos al
mercadillo para turistas y luego al mercado local. Acabamos sentadas
en un banco mirando al río cerca de la estatua de Ho Chi Minh,
charlando sobre Europa.
Thao me dejó en el hospital de la
madre Huyen y la esperé en la puerta unos 15min hasta que terminó
su turno. Luego fuimos en su coche nuevo a su casa donde Huyen
acababa de llegar de la universidad.
En el mercado local había comprado una
sandía como postre para la deliciosa cena que prepararon. Hot Pot de
pato con nudels y espinacas, un manjar. Estuve charlando toda la cena
y comiendo casi tanto como ellos.
Después de cenar fuimos a dar una
vuelta por el nuevo centro comercial de la ciudad. Compré pan, agua
y unos shorts que espero utilizar para salir a correr en breve.
El jueves a las 6h15 estaba el minibus
a la estación en la puerta. Cogí el autobús hacia Chau Doc que me
acercaría un poco a mi siguiente destino, Camboya.
SUNKINDARKNESS